Valvula nasal interna y rinoplastia

Categoría:
Si tienes cualquier consulta o quieres solicitar cita, no dudes en ponerte en contacto con nosotros

¿Qué es la válvula nasal?

La válvula nasal es la zona más estrecha en el trayecto que ha de recorrer el flujo de aire en el interior de las fosas nasales. Comprende el área delimitada por el tabique o septum nasal, el suelo de la fosa nasal y la cabeza del cornete inferior habiendo dos tipos de válvulas nasales: válvula interna y válvula externa.

Tipos de válvula nasal

La válvula externa.: es aquella que comprende el área bordeada por los brazos laterales de los cartílagos alares, los brazos internos de los cartílagos alares (la columela), el tabique y el suelo de las fosas nasales. La válvula interna: es la zona comprendida entre el área bordeada por los cartílagos laterales superiores (también conocidos como triangulares), el tabique nasal, la cabeza de los cornetes inferiores y el suelo de las fosas nasales.

¿Para qué se modifica la válvula nasal en una rinoplastia?

Las válvulas regulan la cantidad de aire que entra dentro de las fosas nasales y que dirección llevará posteriormente. Debido a su pequeño calibre, cualquier circunstancia que disminuya la superficie de esta zona, producirá una gran dificultad respiratoria.

Por eso mismo, al abrir la válvula nasal produce un significativo aumento del flujo aéreo, es lo que se consigue con las tiras de dilatación que se pegan en el dorso nasal (que usan a veces los deportistas) o con los dilatadores internos, abren la válvula y aumenta la cantidad de aire que entra en las fosas nasales.

¿Cómo podemos comprobar que existe un problema en la válvula nasal?

Una posibilidad, es realizar la maniobra de Cottle, que consiste en separar hacia afuera la piel de la mejilla que está al lado de la fosa nasal. De esta forma, la válvula se abre y podemos valorar si entra más aire bien con mediciones del flujo nasal como la rinomanometría o bien, valorando la sensación subjetiva del paciente.

Otra forma, es separando la parte que estrecha la válvula, por ejemplo con un ganchito y comprobando que el paciente respira mejor.

¿Cómo se trata un problema en la válvula nasal?

Si tenemos un problema de la válvula nasal, tenemos varias posibilidades de tratamientos quirúrgicos.

Una primera opción es poner injertos en larguero para los casos en que sea el cartílago alar o el triangular los responsables del cierre de la válvula.

Otra posibilidad, es colocar injertos entre el tabique y los cartílagos triangulares para separar ambos de forma que aumente el área de la válvula, es lo que se conoce como “spreader grafts”.

En muchas otras ocasiones, es una desviación del septum o tabique nasal la responsable de la estrechez de la válvula. En estos casos se realiza una septoplastia para corregir esa alteración para abrir la válvula.

Al realizar una rinoplastia estética deberemos evitar todas aquellas maniobras que pueden dar lugar a una estrechez de la válvula nasal, como por ejemplo, quitar demasiado cartílago alar, con lo cual el cartílago restante puede hundirse hacia adentro cerrando la válvula nasal y que daría lugar a una “nariz pinzada” provocando una dificultad respiratoria muy importante.

En la rinoplastia de preservación, si realizamos una exéresis de la porción inferior del septum (low strip), al mismo tiempo que disminuye la altura del dorso nasal, aumentará la rotación de la punta, con apertura de la válvula, con lo que mejorará la ventilación nasal.